El Reino Unido y Australia están "listos para luchar juntos" si China desata una guerra en la región del Indo-Pacífico por Taiwán. Así lo afirmó este domingo el secretario de Defensa británico, John Healey, días después de que ambos países firmaran una declaración conjunta en la que coincidían en la "importancia crucial de la paz y la estabilidad en el Estrecho de Taiwán".
"Tenemos que luchar, como lo hemos hecho en el pasado, Australia y el Reino Unido son naciones que lucharán juntas", afirmó a bordo del HMS Prince of Wales en Darwin (Australia) junto a Richard Marles, viceprimer ministro del país oceánico, al ser preguntado por The Daily Telegraph sobre las medidas de Londres para ayudar a Taiwán a prepararse ante una posible escalada con Pekín. El portaviones formará parte de unos ensayos militares a realizarse con otros aliados, incluido EE.UU.
Posteriormente, el alto cargo aclaró que su país preferiría ver cualquier disputa en el Indo-Pacífico resuelta "pacíficamente" y "diplomáticamente". "Aseguramos la paz mediante la fuerza, y nuestra fuerza viene de nuestros aliados", concluyó.
Londres y Canberra firmaron el viernes una declaración conjunta en la que instaban a la resolución pacífica de los conflictos mediante el diálogo, y no mediante la fuerza ni la coerción. Además, se comprometieron a profundizar sus relaciones con Taipéi.
Firme advertencia china
Si bien hasta el momento no hubo una reacción de las autoridades chinas a las declaraciones del ministro británico, el embajador chino en el Reino Unido, Zheng Zeguang, declaró el viernes que su país nunca tolerará que ninguna fuerza externa socave los esfuerzos por la reunificación.
"Todos los países que tienen relaciones diplomáticas con China deben gestionar adecuadamente los asuntos relacionados con Taiwán, lo cual es clave para el buen desarrollo de nuestras relaciones bilaterales", expresó.
Cambio de postura
El cambio de postura de la parte australiana llama la atención, puesto que la semana pasada el primer ministro, Anthony Albanese, se negó a garantizarle a Donald Trump la ayuda militar de su país si Estados Unidos entrara en guerra con China para defender a Taiwán.
"Apoyo el interés nacional de Australia y me relaciono con el mundo tal como es, en lugar de como a algunas personas les gustaría que fuera", declaró el mandatario a su regreso de una gira por el gigante asiático. "El interés nacional de Australia se ve favorecido por el compromiso con China", agregó.