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Fotos: Una multitud de kuwaitíes exige la disolución del nuevo parlamento
Decenas de miles de manifestantes han salido a las calles de la capital de Kuwait para exigir la disolución del Parlamento, elegido el 1 de diciembre, y la cancelación de las últimas modificaciones de la ley electoral.
Los activistas demandan reformas políticas de mayor calado, pero no una revolución al estilo de la Primavera Árabe. La semana pasada la minoría chií ganó en los comicios legislativos con un 34% de los votos. En octubre las autoridades de Kuwait habían modificado el sistema electoral reduciendo el número de candidatos que un votante tiene derecho a elegir de un máximo de cuatro a solo uno.
Según la oposición, la enmienda fue adoptada a fin de que el gobierno pudiera tener aún más control sobre el parlamento.
El emir Sabah Al-Ahmad Al-Jaber Al-Sabah invitó al nuevo parlamento a celebrar su sesión inaugural ignorando las reclamaciones de la oposición. El gobierno de Kuwait, donde los miembros de la familia gobernante ocupan los puestos superiores, afirma que las nuevas reglas corresponden a las normas democráticas.
Una multitud de kuwaitíes con banderas, gorras y prendas naranjas, el color del movimiento de protesta pacífica, marcharon a lo largo de un malecón en las afueras de la capital, hacia las Kuwait Towers, lo que supone un hito importante en el Golfo. "Este parlamento es ilegítimo, esta enmienda [de la ley electoral] es ilegal", coreaban los manifestantes.
Otro hecho que provocó la ira del pueblo fue la nueva designación del primer ministro del país, Jaber Al-Mubarak Al-Hamad Al-Sabah, cuyo gabinete había sido disuelto el 5 de diciembre.
Según la oposición, la enmienda fue adoptada a fin de que el gobierno pudiera tener aún más control sobre el parlamento.
El emir Sabah Al-Ahmad Al-Jaber Al-Sabah invitó al nuevo parlamento a celebrar su sesión inaugural ignorando las reclamaciones de la oposición. El gobierno de Kuwait, donde los miembros de la familia gobernante ocupan los puestos superiores, afirma que las nuevas reglas corresponden a las normas democráticas.
Una multitud de kuwaitíes con banderas, gorras y prendas naranjas, el color del movimiento de protesta pacífica, marcharon a lo largo de un malecón en las afueras de la capital, hacia las Kuwait Towers, lo que supone un hito importante en el Golfo. "Este parlamento es ilegítimo, esta enmienda [de la ley electoral] es ilegal", coreaban los manifestantes.
Otro hecho que provocó la ira del pueblo fue la nueva designación del primer ministro del país, Jaber Al-Mubarak Al-Hamad Al-Sabah, cuyo gabinete había sido disuelto el 5 de diciembre.
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