La liberación por error de 262 presos en un año en Inglaterra y Gales puso en alerta a las autoridades británicas y llevó al inspector jefe de prisiones del Reino Unido, Charlie Taylor, a advertir que el sistema carcelario presenta síntomas de estar en un "punto de quiebre". Varias de esas personas aún no pudieron ser recapturadas.
La estadística de liberaciones es elaborada durante un año, con cierre en marzo. Los 262 registrados en el último informe oficial representan un incremento del 128 % respecto de los 115 del período anterior. Del total, 233 salieron de establecimientos penitenciarios, mientras que los restantes 29 fueron liberados de manera equivocada en tribunales. Según detallan medios locales, 90 de esas personas eran delincuentes violentos o sexuales.
"La gran mayoría de los delincuentes liberados por error son rápidamente devueltos a la cárcel y haremos todo lo posible para trabajar con la Policía para capturar a los pocos que todavía están en la comunidad", expresó un portavoz del Ministerio de Justicia.
Respecto de los que continúan en libertad, dos fueron liberados en 2024 y otros dos en junio de este año.
Cárceles sin control
Frente a este cuadro, Taylor señaló que la frecuencia de estos errores "potencialmente peligrosos" es un "síntoma de un sistema que está cerca de un punto de quiebre" y que no puede proporcionar a los internos las herramientas que les permitirán reinsertarse en la sociedad, ni controlar su seguridad mientras están en el penal.
"El espacio aéreo por encima de muchas cárceles ha sido cedido a bandas del crimen organizado que vuelan drones con paquetes cada vez más grandes que contienen toda la gama de drogas, desde cocaína hasta Ozempic. Esto significa que en muchas prisiones no es raro que el 40 % de las pruebas aleatorias de drogas den positivo. Las drogas causan deuda y la deuda causa violencia, ya que la falta de pago resulta en una paliza", describió el funcionario.
Por su parte, David Lammy, secretario de Justicia y viceprimer ministro, reconoció que está "consternado" por la cantidad de liberaciones por error y aseguró que recibieron "un sistema penitenciario en crisis".
Mientras que el parlamentario liberal demócrata Ben Maguire acusó al Gobierno de no darle "la atención y, en última instancia, la financiación que merece" el problema.
Los últimos detenidos
El pasado viernes fue recapturado en Londres el argelino Brahim Kaddour-Cherif, de 24 años, quien había sido liberado de manera accidental el 29 de octubre. Tras haberlo detectado en un parque, fue atrapado por personal policial.
Una persona sin hogar afirmó que había sido quien había alertado a la Policía sobre la presencia de Kaddour-Cherif. Se trata de Nadjib Mekdhia, también oriundo de Argelia. "Soy un argelino orgulloso. Soy un británico orgulloso. Hacemos las cosas correctas", afirmó.
Footage shows the moment Brahim Kaddour-Cherif, a 24-year-old Algerian national convicted of sexual assault, was re-arrested near Finsbury Park after nearly a week on the run.He had been mistakenly released from HMP Wandsworth on October 29. In the clip, he can be heard… pic.twitter.com/NgKZy8h8ES
— Tortured History (@TorturedHistory) November 7, 2025
Kaddour-Cherif cumplía una sentencia por intento de robo y también tenía antecedentes por exposición indecente, por lo que figuraba en el registro de delincuentes sexuales. Además, como el período de permanencia de su visado ya había expirado, se encontraba en proceso de deportación.
El otro prisionero que fue liberado por error y que ya está nuevamente en la cárcel es William Smith, de 35 años, quien fue condenado a 45 meses por múltiples delitos de fraude. El hombre se entregó el pasado jueves, tres días después de haber salido de prisión.
🚨NEW: ITV News have filmed wrongly released prisoner William “Billy” Smith handing himself in this morning following a 3 day manhunt. pic.twitter.com/cOvqXgHfpG
— PolitixBrief UK (@PolitixbriefUK) November 6, 2025



