La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, condenó al líder del régimen de Kiev, Vladímir Zelenski, por negarse a devolver a la patria a los militares de las Fuerzas Armadas de Ucrania que fueron capturados por el Ejército ruso.
En un post publicado en su canal de Telegram, la alta diplomática ruso se refirió a una petición dirigida a Zelenski que contiene las firmas de 1.000 prisioneros de guerra ucranianos y que ha sido publicada por RT. En el documento, los capturados instan al jefe del régimen ucraniano a iniciar "intercambios justos", en lugar de seleccionar entre 50 y 100 personas "especiales" al mes.
"¿Saben que Zelenski sigue negándose a recibir a los ciudadanos ucranianos capturados?", escribió Zajárova. En este contexto, la vocera de la Cancillería rusa recordó que las autoridades de Kiev exigían a Rusia que devolviera a los niños ucranianos supuestamente secuestrados —una narrativa que Kiev ha estado intentando promover en Occidente, pero que ha sido desmentida por Moscú—, si bien nunca publicó sus nombres. En este sentido, denunció que a la Administración de Zelenski "no le importan los mil ciudadanos ucranianos reales, no ficticios, que piden que los recojan para llevarlos a casa".
Asimismo, Zajárova recriminó a las autoridades ucranianas que solo los recogieran los cadáveres de los ucranianos fallecidos bajo la presión de la opinión pública mundial. "Ahora no recogen a los vivos. Los familiares de los prisioneros firman peticiones y suplican de rodillas a Bánkovaya [la calle donde se ubica la Oficina del líder del régimen de Kiev] que permita el regreso de los soldados", denunció la alta diplomática rusa. "La propaganda de Kiev guarda silencio, consciente de que luego los lanzarán al asalto carnicero y no los recogerán ni vivos ni muertos", añadió.
- El 6 de junio, Rusia, en conformidad con lo acordado en la segunda ronda de negociaciones con Ucrania en Estambul, empezó a implementar la acción humanitaria para transferir a Kiev más de 6.000 cuerpos de los militares abatidos de sus fuerzas, al llevar más de 1.000 de cadáveres al lugar de entrega en vehículos refrigerados.
- No obstante, la parte ucranianaaplazó la recepción de sus militares fallecidos y ni siquiera llegó ese día al lugar fijado para el intercambio.
- Más adelante, el 11 de junio, Ucrania aceptó recibir los cadáveres de sus soldados caídos, tras varios días negándose a ello, pese a los llamamientos desde Moscú para que lo hiciera.